La rendición de Japón: Operación soviética "Tormenta de Agosto" (79 años). Por Eduardo Rivero. 08/08/2024

Como todas las farsas impulsadas desde la literatura, la antigua academia o el cine hollywoodense, la supuesta rendición de Japón gracias a las bombas atómicas es otra mentira histórica de EE.UU.; una mentira bien posicionada en los medios que ocultó el verdadero motivo de dicha rendición, la cual fue propiciada también gracias a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas: La Operación "Tormenta de Agosto".

La Operación Tormenta de Agosto o también conocida como la "Batalla de Manchuria" comenzó el 8 de agosto de 1945, aplastando en solo 20 días al ejército imperial japonés.

Esta operación fue prácticamente la ultima de toda la Segunda Guerra Mundial, para iniciarla, el viaje se efectuó a bordo de más de 3.000 locomotoras del Ferrocarril Transiberiano a lo largo de más de 10.000 kilómetros que día y noche fueron llevando sobre la estepa de Siberia a millares de soldados, tanques, cañones, vehículos, municiones, etcétera. El Ejército Rojo inició finalmente la gran ofensiva con una intensa preparación de artillera consistente un bombardeo con 20.000 cañones y lanzacohetes Katyusha que sepultaron las primeras líneas de defensa enemigas, cortaron las comunicaciones y provocaron el caos en todo el frente sostenido por el Ejército del Kwantung. 

La Tormenta de Agosto de la URSS en Manchuria constituyó una de las más brillantes victorias militares del Ejército Rojo durante la Segunda Guerra Mundial. Bastaron sólo tres semanas para que las tropas soviéticas aniquilasen por completo al Ejército del Kwantung, considerado la fuerza terrestre más poderosa del Japón, provocando a sus enemigos cientos de miles de bajas y arrebatándoles gigantescas extensiones de territorio como todo el Manchukuo, el norte de Corea y el noreste de China por encima de la Gran Muralla. 

La conquista de Manchuria tuvo implicaciones importantísimas a nivel geoestratégico, la presencia de decenas de divisiones soviéticas permitió suministrar armas y pertrechos a los partisanos del Ejército Rojo Chino de Mao Tse-Tung, además de entregarles todas las ricas industrias de la región, con las que hacer frente al Kuomintang del Presidente Chiang Kai-Shek. Gracias a esta base y fuente inagotable de recursos, el territorio manchú fue decisivo para la victoria maoísta en la Guerra Civil China y para la proclamación de la República Popular de China en 1949.