El privilegio que tiene la amada y sagrada tierra venezolana en cuanto sus riquezas naturales es casi ilimitado, por definirlo de algún modo. Es posible comprobar y gratificante por demás, enterarse u obtener el conocimiento sobre los grandes recursos que posee el pueblo de Venezuela en cada una de las áreas que comprenden a la hermosa naturaleza; desde el famoso petróleo, pasando por el agua dulce hasta la diversidad territorial o climática.
Pero solo el conocer o saber que poseemos dichas riquezas, no es suficiente para comprender la realidad en la cual se desenvuelve el país tanto en el escenario nacional como en el internacional. Por tanto, para ello es necesario, adquirir una conciencia que va más allá del conocimiento de esta realidad; entre las cuales debe colocarse como factor fundamental para el análisis, que todos los recursos naturales o en defecto su mayoría, son de carácter estratégico en diversos modos, ampliamente codiciados por potencias extranjeras.
El petróleo como es sabido, aparece entre estos, como el más estratégico dentro de la gama con la que proveyó Dios a esta hermosa tierra. En el mismo sentido aparecen elementos como el oro, el diamante, el hierro, la bauxita, el coltán y el coque; este último, un derivado del petróleo extrapesado existente en la Faja Petrolífera del Orinoco Hugo Chávez, la mayor reserva de petróleo de la humanidad (300 mil millones barriles).
El coque, aparece como resultado del proceso de refinación de dicho petróleo, obteniendo así cantidades en toneladas que poseen características para usos valiosos en la sociedad. Entre los más útiles se puede encontrar el de catalizador para generación en plantas eléctricas de gran potencia, que podría ser utilizado para instalación de plantas del Estado, de igual forma, el denominado “acicular”, que es utilizado para la elaboración de electrodos de acero u aluminio y que pudiera ser de gran impacto para la industria nacional; tal como lo establece el Plan de la Patria legado por el Comandante, en su “Gran Objetivo Histórico N° 3, Objetivo Nacional, 3.1. Consolidar el papel de Venezuela como Potencia Energética Mundial”.
Por si fuera poco, del proceso de extracción del coque venezolano, es posible obtener otro recurso que suma a las posibilidades de desarrollo, como lo es: El Vanadio. Este es un metal de origen químico transicional de símbolo V y número atómico 23, es catalogado como el metal de más dureza en el mundo, y que además se encuentra poco en la naturaleza que bordea el planeta, por lo que constituye al coque, como uno de los pocos recursos a nivel mundial que contiene vanadio.
Impresionante verdad? Pero aun así, se debe seguir el legado del más grande hombre del sigo XIX, el Libertador Simón Bolívar, además de proteger dichos recursos para el bien nacional, estimular la riqueza espiritual contenida en la sangre venezolana, diciendo con el que “Yo deseo más que otro alguno, ver formar en América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad y su gloria.”.
Eduardo Rivero
Movimiento Universitario Francisco de Miranda.
eduardokemp@hotmail.com @Eduardo_jrc
0 Comentarios