El Cicerón de América: “¡Huele a Azufre todavía!”. 20-09-2020

Nunca el planeta había presenciado un discurso impregnado con la más enorme demostración de oratoria como aquel donde un “¡Huele a Azufre!” estremeció a la historia mundial para siempre.

El discurso del Comandante Chávez impregnado de una combinación de cátedra histórica, manejo del tiempo, análisis sintético de la coyuntura, dignidad y valentía sólo son equiparables a discursos como los del Che Guevara en la ONU en 1964, el de Fidel Castro en 1960 o los de Martin Luther King “I have a dream”, Evita Perón “Mis queridos descamisados”, Salvador Allende “La historia es nuestra y la hacen los pueblos” por ejemplo; y sólo superado por discursos como los de Homero patentados en su obra maestra “La Iliada”, pronunciado por personajes como Aquiles y Odiseo, los de Cicerón en su Obra “De Oratore”, donde éste patenta su estampa de padre de la oratoria; y el de “Angostura” en 1815 de nuestro padre Libertador, el cual es considerado una joya de la oratoria mundial.

Aquel 20 de septiembre de 2006 el mundo fue testigo de uno de los discursos más elocuentes y más influyentes de la historia, el Comandante en un relámpago de genialidad y perfecta conjugación de palabras, precisión, gestos, ideas, retórica, análisis y perspectiva coyuntural e histórica mundial derrochó talento discursivo en un impresionante corto tiempo de sólo 23 minutos. Aquel discurso pleno de dignidad levantó la llama de la conciencia mundial, levantándose como la voz de los pueblos y clavándose como una daga en el propio corazón del miserable imperio decadente, iniciando así una etapa de derrumbe de la ideología capitalista.

El genial e impactante discurso se estructuró básicamente en 4 etapas, una donde la elocuencia y la persuasión se presentaron como la carta de entrada de forma muy carismática, sugiriendo a la vez la lectura de una obra magistral titulada “Hegemonía o Supervivencia”, la cual tiene como autor a Noam Chomsky, pasando a la vez por otras etapas de denuncias contundentes sobre el carácter fascista y criminal del imperialismo y sus gobiernos; otra de análisis histórico sobre la violencia del sistema y la lucha por la justicia, para finalmente culminar con una etapa de propuestas para intentar salvar el mundo al más cálido sentido humano y bolivariano.

Eduardo Rivero

Analista de Temas Geopolíticos

Eduardokemp2140@gmail.com



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