La Geopolítica es la ciencia de la estrategia. Ésta frase refleja una realidad vital para la soberanía, la independencia y la supervivencia de las naciones; cada país por tanto, ejerce una forma de geopolítica a fin a sus intereses y basado en su visión del mundo, en el caso de EEUU, lamentablemente; sus gobiernos están guiados por la avaricia, la falsedad, la mentira, el maquiavelismo y la cobardía. Por lo que su práctica geopolítica siempre ha sido y será de manera inmoral hasta sus últimos días.
Hoy,
apelando una vez más a la inmoralidad de sus mentiras, falsedades, falsos
positivos y todo tipo de maquiavelismo (el fin justifica los medios), ejercen
una agresión injusta contra el pueblo noble y pacífico de Venezuela; no
contando con el espíritu inquebrantable de resistencia, de dignidad, de
estrategia y de Geopolítica Bolivariana basada en los más elementales
sentimientos de paz y de humanidad pero tan igual o superiores en audacia que
su maquiavelismo decadente.
Su
razón real es un hecho que el pueblo venezolano debe comprender a cabalidad
para elevar su moral; que la magnitud de ésta agresión se corresponde
proporcionalmente al logro histórico que estamos obteniendo como nación, que no
es otro que el desmontaje definitivo del sistema mundial llevado desde la
Segunda Guerra Mundial a partir de 1945 en Breton Woods. Todo en favor de la
consagración de la Multipolaridad que ya hoy se evidencia más y más en la práctica.
Otra
de las razones de peso, es su desesperación ante ése declive total que hoy no
logran detener, y el cual se refleja en recientes hechos contundentes como el
ascenso histórico record del valor del oro a nivel mundial, en detrimento del dólar
como moneda de reserva internacional, el desplazamiento de China como mayor superpotencia
económica o en la derrota diplomática propiciada por nuestra patria a través
del Embajador Samuel Moncada en su magistral convocatoria e intervención en el
Consejo de Seguridad de la ONU.
En
ése sentido, se puede avizorar una próxima jugada previsible; probablemente intentarán lanzar
un supuesto ataque a territorio venezolano montado desde un falso positivo (quizás
lanzando algunos misiles a sitios inhóspitos en nuestro territorio), para así
presentarlo a la opinión pública occidental como un logro real contra
Venezuela, y así engañar y manipular a sus seguidores en sus países y continuar
su ritmo de negocio depredador, tratar de justificar el gasto de todos esos
despliegues militares, logísticos, de tropas, de uso de combustibles y de
armamentos ante el Congreso de los EEUU para solicitar los desembolsos
reflejados en miles de millones de dólares que van a terminar en las arcas de
sus empresas.
Por supuesto, ni con éste nuevo intento inmoral podrán con el pueblo valiente de Venezuela; nuestro deber es seguir la resistencia y con estrategia derrotarlos una vez más, aprovechar las oportunidades donde ellos dejen debilidades, y una vez neutralizado el despliegue, impulsar un freno a la guerra económica promovida desde el tipo de cambiario por el dólar criminal y lograr una recuperación paulatina de los ingresos de las familias ya que se abre un momento propicio y en general, retomar las sendas de la justicia social un tanto desviada a causa de la guerra, las coacciones y el bloqueo criminal a partir del Decreto Obama, pero una justicia social impulsada por la Revolución Bolivariana desde sus inicios, que con seguridad pronto volveremos a lograr.
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