Nació Jesús, nació la esperanza. Por Eduardo Rivero. 24-12-2019


Uno de los temas más manipulados en la historia de la humanidad junto al del Nazismo y la II Guerra Mundial es todo el que gira alrededor de Jesucristo. Son millones las mentiras impulsadas desde los centros imperiales según les convenga el caso con tal de sostener su dominio sobre las clases explotadas. Lo que en un pasado era conocido como “Cassus Bellis” (causal de guerra) por ejemplo, hoy se conoce como Falsos Positivos o “Fake News”; pero en esencia sigue siendo lo mismo, la estrategia falsa, desleal, baja y manipuladora para obtener sus objetivos de explotación.

La grandeza del hijo de Dios, solo es comparable a su vez al nivel de falsedades que se han tejido a su alrededor. La primera tiene que ver precisamente con la fecha de su nacimiento, ya que nunca se pudo saber cuando realmente nació Jesús debido a la inexactitud de los calendarios existentes para la época. De ahí parte todo. Fue el imperio romano bajo el mandato del emperador Constantino en el año 300 el que decidió adoptar al cristianismo como base de su dominación religiosa, colocando como supuesta fecha de nacimiento el día 25 diciembre del calendario moderno.

Sobre Jesús se ha mentido además, en cuanto a los eventos más resaltantes de su obra, por ejemplo, se asegura que sólo actuó de manera religiosa y espiritual, cuando en realidad no sólo pregonó sobre el reino de los cielos sino que enfrentó a las mafias especuladoras que tranzaban monedas judías, romanas y griegas en el templo sagrado de Jerusalén, los famosos mercaderes del templo. Esa fue su sentencia ya que dichas mafias hicieron lo posible por vengarse y llevarlo hasta la muerte.

De igual forma Jesús asumió la política de una manera original, utilizando la filosofía como base de su organización progresiva, con ejemplos y parábolas iba haciendo comprender a todos sus seguidores de los hechos sociales, políticos y espirituales de la forma más audaz y autentica jamás conocida.

Otra de las famosas manipulaciones tejidas sobre si, es la de la “supuesta” traición y venta de Judas por 30 monedas, varios hechos discutibles hacen pensar que hay mucho más detrás de ello, ¿si Jesús estaba siendo buscado era porque estaba escondido? ¿si estaba escondido como hicieron para capturarlo? ¿si su destino era morir por nuestros pecados porque se escondía?, son preguntas que seguramente al responderlas no le encontraremos lógica.

Lo primero es que el mismo Judas fue engañado por Caifás, ya que judas aspiraba a un cargo político dentro de la esfera del poder, cuando Caifás le prometió que indicando la ubicación de Jesús para darle paso a ese cargo; se hizo tarde, ya que Jesús fue capturado, pero ello se esconde en la mayoría de versiones al publico. La prueba es que la única salida que encontró Judas ante su error indeseado fue el de suicidarse ahorcándose. Cosa que tampoco se dice. Y la pregunta de mayor contundencia que podemos hacernos es: ¿En caso de asumir como verdadera la traición de Judas, ¿Quién lo asesinó al final? ¿Acaso fue la traición de Judas que lo asesina ó más bien la acción de las élites representadas en el Sanedrín y en Roma? Seguro todos sabrán cual es la respuesta.

Jesús también fue claro en sus enseñanzas que sus luchas traerían confrontación política, sosteniendo en sus parábolas que su causa traería discordia hasta entre las familias, y que sólo el que siguiera su causa con desprendimiento gozaría de su misericordia. El final de Jesús por supuesto también es victima de manipulación, nunca se explica que su muerte en realidad fue un asesinato, posterior a una gran cantidad de torturas y vejámenes con el fin de atemorizar a sus seguidores y la población en general, hecho al cual se tapó con un nombre más o menos aceptable como fue el de crucifixión: claramente el peor falso positivo que puede haber. Así mismo tampoco se explica que Jesús y Barrabás ya se conocían, y que incluso Barrabás el cual no era un ladrón sino un guerrillero de una parte del pueblo judío que también peleaba contra la opresión imperialista le planteó a Jesús unir fuerzas para pelear juntos en vista de los miles de seguidores que movía Jesús. Y que les tendieron una trampa maquiavélica a los dos, ya que os romanos sabían que al poner a elegir al pueblo en una supuesta elección entre Barrabás y Jesús, la gente por temor y por lógica elegiría a Barrabás porque ya sabían de sus luchas armadas contra el imperio.

De esa forma mataban dos pájaros de un solo tiro, tendrían luz verde para lavarse las manos ante el asesinato de Jesús y montarle una emboscada con tropas a Barrabás al liberarlo y asesinarlo en el camino.

Aún así, la fuerza que despertó Jesús desde su obra idearia y su ejemplo es tan fuerte y enorme, que independientemente de las mentiras, los falsos positivos y fakes news ó la fecha en que nació, con el nació la esperanza de un mundo mejor y trascendió las fronteras de los países. La primera base filosófica para la construcción de una sociedad justa; similar a la socialista, análoga del Reino de Dios en la tierra. Nuestro Libertador Simón Bolívar se compara con él, en uno de sus pasajes, sentenciando “Jesús, el Quijote y yo, los tres majaderos de la historia”. Sigamos por ende el ejemplo de Jesús, desmantelando las mentiras con su bandera de lucha, redescubriendo la historia verdadera, como lo dijo nuestro Alí Primera con “nuestro primer camarada”.
Eduardo Rivero
Analista de Temas Geopolíticos
 @Eduardo_jrc / @Eduardo_jrc1

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